viernes, 28 de enero de 2011

Un nuevo día





Es increíble ver lentamente correr el ardiente velo del horizonte
Sentir la luz que se desliza como una suave brisa
Increíble universo de tonos
Increíble paz, contundencia y naturalidad inamovible
Irremediable morir al despertar que trasciende la calma de la agonía
Cuando se develan los destellos de luz, esperanza y alegría
Cuando un renacer se acerca la renovación del ocaso se aproxima
Es como una transición entre la muerte y la vida
Un mar de reposo que renueva y aquieta la prisa
Hasta en el final de las cosas hay belleza escondida
Porque hasta al final de un ciclo la renovación se atisba
Porque todo es abrir y cerrar, iniciar, terminar
Mi conciencia serena descansa para un nuevo día

(Miguel Chavez)

Foto tomada desde la ventanilla del avión de camino a Santiago.

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